Para mí esta es de las mejores soluciones para los que nos gusta el picante y no podemos echarnos todo lo que quisiéramos mientras cocinamos porque si no los demás comensales se quedarían sin probar bocao.
Echarse unas rodajitas de guindilla es una opción bastante cutre porque, como el picante sólo queda en la rodajita, la sensación gustativa es mucho más pobre y el picante no se distribuye homogéneamente. Es una solución para algunos platillos, pero para mí no es ni contemplable para [Seguir leyendo…]