Un platillo buenísimo con una manera distinta de preparar el rabo de toro… [Seguir leyendo…]
El Pho está entre mis platos vietnamitas favoritos, el que no haya probado este caldo no sabe lo que se está perdiendo, no puedes dejar de tomar antes de ir al hoyo.
El original tiene una base de sopa de ternera aromatizada con anís estrellado, canela o cassia, jengibre y cebolla semiquemados en el grill y va con tallarines de arroz, aromáticos frescos y carne cruda en láminas que se cuece con el calor del caldo y carne que se usa para hacer el caldo con algún que otro tendón. Increíble.
Pero esto es harina de otro costal, es una versión muy modificada, el caldo va gelatinizado en caliente (muy caliente) con goma gellán, condensando en un solo ingrediente los tallarines y el caldo. Y como el plato parece que nació por influencia francesa a partir de su pot au feu francés, le he añadido un huevo poché jugando con la doble versión del pho y los huevos gelee. Y para añadir un toque crujiente, va con unas nada ortodoxas avellanas picadas y tostadas.
La carne va a parte, salteada en su propia grasa (extraída del caldo) y mezclada con un poco de salsa Hoisin, caldo concentrado y la grasa del rabo de toro.
Ya hice una versión parecida hace tiempo, gelatinizando los tallarines con agar agar, pero con esa versión los tallarines no tenían una textura tan sólida y no toleraban temperaturas tan altas.
Ahí vamos con [Seguir leyendo…]
Bueno, y con esta receta participo en el I Certamen Gastronómico Paraíso de Sabores organizado por las firmas jamonesdospuntocero.com, iloveaceite.com, elamasadero.com y lacocinadebabette.com, patrocinado por el portal wikitapas.com y con la colaboración del blog conloscincosentidos.com
Vamos con la preparación… [Seguir leyendo…]
Parece mentira que se pueda hacer un pan casero con tan poco trabajo y que quede tan bueno, mejor incluso que el de cualquier panadería. Y lo increíble es que no hay que amasar, sólo mezcla los ingredientes, deja reposar y hornea. Y disfruta del increíble placer del olor del pan horneándose… ¡por lo hablar del gusto que da tomar tu propio pan!
Lo único que hay que hacer es hidratar un 1 gramo de levadura seca en agua entre 40 y 43ºC (ó 2 gramos de levadura fresca en agua entre 20 y 27ºC) y luego, en un bol grande mezclar 400 gr. de harina de fuerza (si no tienes puedes usar harina normal), 8 gr. de sal, 260 gr. de agua y la levadura (es decir, sobre el peso de la harina, un 2% de sal y un 65% de agua). No hace falta ni amasarlo.
Luego [Seguir leyendo…]
Cigalas: pela las cigalas, abre por arriba y retira el hilillo de intestino. Corta los extremos laterales para que tenga una bonita forma y abre la parte superior para que se vea la carne más blanca y además cueste un poco más de lo normal identificar que se tratan de cigalas.
Para la mahonesa de aceite de cigalas os dejo [Seguir leyendo…]
De la cocina tailandesa lo que más se conoce son sus sopas, sus pad thais y sus curries. Pero sus ensaladas han permanecido en la oscuridad, eclipsadas por las anteriores. Y no lo entiendo porque son increíbles, realmente aromáticas, picantes, sabrosísimas, sanísimas y muy ligeras. Y lo que las hace aún más interesantes es que no tienen nada que ver con lo que nosotros pensamos que es una ensalada.
Ahí va un ejemplo delicioso de una ensalada del noreste (adaptada de una receta de Thai Food del grandísimo David Thompson. A practicar la ensalada tailandesa, chavalines [Seguir leyendo…]