Me encanta que con los ingredientes que tiene un plato tailandés recuerde tanto a uno andaluz, esto sí que es fusión, ¿eh?
Es un plato de sabores sencillísimos, de los que se toman a medio día en cualquier casa entre semana, solo que ésta tiene una preparación un poco más cuidada, con las alcachofas bien peladas y fáciles de comer. Claro que pensar en pelar estas deliciosas flores y tirar los pétalos exteriores sin aprovechar la poca carne que tienen me daba una pena increíble, así que cocí y pelé cada uno de estos pétalos y con ellos preparé una salsita buenísima para acompañarlos. Además para que no se oxide he utilizado perejil en vez de limón, que no aporta ningún sabor ni aroma nuevo a la alcachofa.
Aunque dan un poquito de trabajo, son facilísimas de preparar y merece la pena porque consigues convertir un plato de medio día en una auténtica delicadeza para tomar en un día especial.
Para prepararlas: [Seguir leyendo…]