Banh cuon: uno de mis favoritos. Masa finísima de harina de tapioca y arroz cocinada al vapor, rellena de cerdo y setas de oreja picadas y con chalotas fritas y pork floss por encima. Gran plato.
El secreto está en conseguir una masa finísima, tanto que casi ni se ve al recogerla después de cocerla.
Como casi siempre, vinagreta a base de salsa de pescado, chiles y aromáticos para acompañar el dumpling.
Nem cuon o Gỏi cuốn: los famosos rollitos vietnamitas, mal llamados de primavera: rollitos de papel de arroz rellenos a base de hierbas aromáticas, zanahoria, noodles y, en función de la zona y la disponibilidad de ingredientes, con gambas, cerdo o lo que se tenga más a mano. Mejor llamarlos rollitos de verano (y no de primavera, esos son los nem fritos) o rollitos de ensalada.
Otras variaciones de los rollitos, esta, la más típica, con gambas y cebolleta saliendo de uno de sus extremos.
Y estas con paté de cerdo y setas.
Rollitos de primavera: rollitos fritos que se acompañan de hierbas aromáticas, lechuga y se mojan en nuoc cham (salsa de pescado, lima y azúcar). Sin foto.
Banh bot loc: pequeñas empanadillas de masa de tapioca rellenas con gambas y acompañadas de los aromáticos de siempre.
Banh Beo.
Pequeños platitos de masa a base de harina de arroz cubiertos de una salsa de marisco y noodles crujientes típicos del centro del país. Siempre se sirven junto con salsa de pescado con chiles para darle un puntito picante y salado al gusto de cada uno.
Detalle para apreciar la masa de arroz de la base. No están nada, nada mal.
Los misteriosos paquetitos que ningún turista se atreve a comprar porque no saben qué contienen. Ahí está la gracia, ¿qué más da? te puedes llevar una muy grata sorpresa y si no te gustan, no pasa nada, no te vas a arriunar. Este buenísimo, de carne de cerdo y setas de oreja cubierta en arroz glutinoso y hoja de plátano.
Otro paquetito misterioso envolvía esta masa hecha con harina de tapioca y rellena de carne de cerdo. Una maravilla y mejor incluso si se acompaña de Chả lụa, el típico fiambre vietnamita. Los dos con una textura elástica deliciosa.
Ban xeo: uno de mis favoritos. Unas tortillitas crujientes de harina aderezadas con cúrcuma y rellenas de brotes de soja, gambas y cerdo. Se coge una hoja de papel de arroz (al fondo), media hoja de lechuga, plátano verde, hierbas aromáticas y una pieza de la tortilla crujiente. Se envuelve bien y se moja en el nuoc cham (agua, vinagre o lima, azúcar, salsa de pescado, ajo y chiles). Increíble.
Me sorprendió mucho las láminas de plátano verde, tan verde que tenía un amargor potente y muy interesante que se difuminaba en el conjunto aportando ligereza y frescura.
Otra versión de ban xeo, fina y crujientísima, al estilo del sur, hecho en sartén más grande.
Erny says:
25 junio, 2015 at 16:19
Con estas fotos me has llegado muy hondo.
Tanto que he tenido que quitarme la baba.
Grruppss.
celia says:
30 junio, 2015 at 00:02
QUE RICO! me encantan estos platos.