Acabo de llegar de mi viaje de dos semanas del que os hablaba en el post Sorpresa!… con la foto y el título, ¿caéis en dónde he estado? (el que lo sepa de antes / se lo haya contado no puede decir na’, ¿eh?)

Los próximos posts iré posteando la parte gastronómica del viaje como si estuviera ahí, casi en forma de diario y os adelanto que me propuse probarlo todo, todo, todo. Van a ser muchos posts, probablemente entre 10 y 15. He tenido la increíble suerte de visitar el país quedándome en casa de locales, conociendo su cocina casera y pudiendo acceder a restaurantes que ningún otro turista conocería (resulta casi imposible entrar en restaurantes que no se sabe qué ofrecen, con cartas inexistentes o con (otra pista) grafismos incomprensibles para nosotros).

Una de las partes más interesantes del viaje fue una visita a un mercado famosísimo, guiada por gente de una escuela de cocina muy conocida del país  y con las mismas personas que llevaron a Ferrán Adriá a conocer el mercado y sus productos. Pudimos acceder a zonas de acceso restringido para los turistas y conseguir comunicarnos con la gente de los puestos en su propio idioma.

Creo que os va a gustar y dar mucha envidia a más de uno…