Esta es una de las ensaladas que más me han gustado desde hace mucho tiempo. Tiene un sabor intensísimo, combina el sabor fresco de las anchoas en conserva y la intensidad de la salsa de pescado, que se equilibra con el jugo del limón creando unos aromas complejos y una muy interesantes mezcla de dos culturas y formas muy distintas de «pensar» el pescado. Además la aportación del beicon crujiente queda genial… y más aún con el toque fresco de los aromáticos y la guindilla. Mar, montaña, España, Tailandia…
Ingredientes:
- Judias verdes
- Beicon
- Anchoas
- Salsa de pescado tailandesa (una cucharada sopera)
- Zumo de limón
- Guindilla frescas «bird’s eye»
- Lemongrass
- Cilantro
- 1 hoja de lima kafir
Preparación:
En una sartén dora el beicon cortado en trozos pequeños hasta que quede crujiente. Retira sobre un papel absorbente.
Haz las judías a fuego fuerte utilizando parte de la grasa del beicon hasta que queden doraditas y al dente.
Pica el resto del los ingredientes y haz una vinagreta con el zumo de limón, la salsa de pescado, una pequeña cantidad de la grasa del bacon y un chorrito de aceite de oliva (poca cantidad, no debe quedar muy grasa).
Sirve la ensalada templada.
jose luis says:
23 enero, 2012 at 21:16
¿la salsa de pescado es garum?
si no lo es donde la conseguimos los de la España interor?
Íñigo says:
23 enero, 2012 at 22:01
En supermercado asiáticos. Y es muy parecida al garum. La has probado alguna vez?