Esta es una de mis pintxos favoritos. Lo hice hace un año, en temporada de brevas y estaba deseando que volviera la época para tomarlo otra vez.
Me encanta cómo combina el dulzor y el sabor ligeramente ácido de las brevas con la sensación más grasa las mollejas de pato.
Estas mollejas no tienen nada que ver con las de ternera o cordero, la carne es mucho más compacta y tiene una textura gelatinosa que a mí me encanta. En cuanto al sabor, recuerda al jamón ibérico cuando lo cueces para un caldo.
Ingredientes:
- 1 lata de mollejas de pato confitadas
- Brevas
- Pan de chapata
- Sal maldón
- Pimienta de Sichuán (o si no tienes, sustituye por pimienta negra)
- Un chorrito de aceite de oliva
La preparación es sencillísima:
Lo primero que tienes que hacer es cubrir la lata de mollejas (sin abrir) con agua hirviendo para que se funda la grasa y las mollejas cojan un poquito de temperatura (unos 50º).
Mientras tanto, tuesta el pan de chapata y pela y corta las brevas en rajitas.
Abre la lata, corta las mollejas por el centro y dora en una sartén o plancha a fuego muy fuerte hasta que se caramelicen por fuera.
Pon 2 rajitas de brevas en cada tostada, coloca encima media molleja, añade un chorrito de aceite (UN CHORRITO), la sal en cristales y la pimienta de Sichuán (o la pimenta negra).
Codornices modernistas en escabeche
O también en ensaladita, que también queda genial con una vinagreta a base de vinagre de Jerez, aceite y salsa de soja:
Ensalada de mollejas de pato confitadas « Umami Madrid's; ácido, dulce, salado, picante… y a veces amargo says:
26 mayo, 2011 at 08:54
[…] e incluso así está buenísima. Y qué contaros de las mollejas de pato que no os haya contado antes, nada más que no te puedes morir sin haberlos probado, gelatinosos, sabrosísimos… una […]