Muchos habréis visto que la nevera no frost tiene muchas ventajas prácticas, pero el principal inconveniente es que seca la superficie de muchos alimentos, incluso cuando se cubren con una lámina de papel film porque el sistema de enfriamiento por aire seco (que evita la formación de escarcha en las paredes del aparato), también reseca la superficie de la comida.
¿Y por qué no convertir una desventaja en una ventaja? Aquí he aprovechado esta propiedad para deshidratar un piel de cerdo y hacer cortezas o chicharrones, como los llaman en EEUU y en Latinoamérica.
Cocí la piel de una panceta curada en sal hasta que quedó tierna y luego la dejé en la nevera una semana dándole vueltas de vez en cuando para que se secara toda la superficie de forma homogénea. Al cabo del tiempo la piel se quedó tan seca que parecía plástico duro
Y como prueba, al freírla en aceite, quedó perfecta: en seguida sufló formando burbujitas por efecto de evaporación del agua residual que quedaba en su interior y no quedaron partes duras.
Os dejo el link al post donde explico cómo hacer chicharrones o cortezas paso a paso de la forma clásica. La principal diferencia está en que se aplica calor en vez de aire frío.